CRÓNICA DE LA VISITA
El origen de la Casa de Ganaderos o Cofradía de san Simón y san Judas, patronos de la entidad, se remonta a la Edad Media y muy vinculado a la conquista de Zaragoza. Esta institución fue establecida para defender los privilegios concedidos por los reyes a los propietarios de ganado del Reino de Aragón. Documentalmente ya consta en 1218 su existencia, fundada por Jaime I de Aragón, quien nombró el 18 de mayo a Domingo de Montealtet, Justicia de los Ganaderos de Zaragoza, otorgándole la jurisdicción civil y criminal en todos los asuntos relativos a la ganadería. Pronto se convirtió en una importante institución en nuestra ciudad.
El Justicia de Aragón era elegido entre los ganaderos hasta el reinado de Felipe V. Es una institución parecida a la Mesta castellana, ésta última fue disuelta en 1836 por Isabel II, pero la de Ganaderos aún sigue activa en la actualidad. La Mesta abarcaba todo el territorio de la Corona de Aragón, en cambio la de Ganaderos, aunque tenía jurisdicción en todo el Reino de Aragón, solo agrupaba a los ganaderos vecinos de Zaragoza y sus aldeas.
Incluso la Casa poseía su horca al comienzo del camino de San Gregorio (que conducía a Huesca), donde se cumplían todas las sentencias con pena corporal que provenían del Justicia de Ganaderos y que era conocida entre los zaragozanos como la “Horca de los Ganaderos”.
En su archivo se conserva una importante documentación que nos permite conocer la historia de Aragón desde Jaime I hasta nuestros días. Este archivo es uno de los mejores de Aragón. Actualmente está informatizado y está abierto a los investigadores de lunes a viernes de 9,30 horas a 13,30 horas. Hoy en día es una de las organizaciones ganaderas de ovino más importantes de España.
En el siglo XIV la Casa de Ganaderos estaba situada en un antiguo caserón en la calle de san Andrés, que, ya en el siglo XVI, se tienen noticias de su deterioro; y en el mismo solar se levantó una nueva sede en 1556, relacionándose con la cercana parroquia de san Andrés (iglesia desaparecida). Los años pasaron y nuevamente el edificio, sede de la Casa de Ganaderos amenazó ruina y fue derribado, construyéndose en 1914 un nuevo edificio, proyectado por el arquitecto Teodoro Ríos Balaguer. Estamos ante un edificio ecléctico, con influencia de los siglos XVI y XVII. Tiene cinco plantas y sótano, rematadas con el típico alero de los palacios renacentistas aragoneses. Es un edificio en el que se han utilizado diversos materiales: ladrillo para los muros, la piedra y el cemento, para la decoración de puertas y vanos. Estos son adintelados, rematados en arcos carpaneles, con las claves e impostas decoradas.
La portada de acceso tiene dos hojas, por encima de ella podemos ver el escudo de la Institución. Dos leones rampantes sostienen el escudo de la Fundación de Casa de Ganaderos, con la cruz y un cordero sobre ella. En la parte inferior la inscripción: DE LA CASA DE GANADEROS DE ZARAGOZA.
En el interior podemos ver el antiguo suelo de mosaico hidráulico con decoración geométrica y vegetal; escaleras con esquinas y contrahuella de madera; la rejería del antiguo ascensor; y la decoración de las puertas de las diversas estancias. Algunos salones constan de artesonados.
Hoy en día, funciona como una cooperativa que cuenta con 250 socios. Su labor se centra en la comercialización de carne de cordero de primera calidad, proveniente de las granjas de sus asociados. Dado su carácter tan especial debido a su antigüedad, se dedica también a divulgar su valioso archivo y su historia, a través de su Fundación.
Una entretenida e instructiva jornada.
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